A ella le encantaban mis besos, también le encantaba nuestra cama, y al juntar eso, creía que le gustaba yo entero. Diciéndolo constantemente lograba levantarme el autoestima.
Ella es una mina genial, divina, súper capaz, pero yo no estaba en ese momento como para meterme en una relación, tenía que resolver *cosas*.
1 comentarios:
la retrospectiva a veces te mata. a pensar en el próximo target.
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