pero lo hacemos igual

12 abril, 2012

Esperando

Estaba haciendo cola en el banco, leyendo, esperando. Levanto la mirada, me peleo con las caras preocupadas y la encuentro. El jean le marcaba la cola, su peinado me resultaba atractivo y su remera semi-transparente me calentó un poquito.

Esperando y sin matarla con la mirada, fantaseé. La besé intensamente, le mordí un poco el cuello y el lóbulo, la desvestí, la agarré firme de las costillas y con su respiración agitada la sentí extasiarse. Me calenté en la cabeza pero no sentí la erección.

Llamaron mi número y el dinero cortó la fantasía.

4 comentarios:

Luc dijo...

Pero que el dinero nunca les corte la fantasía.

Victoria B dijo...

Que genialidad el poder de la mente y la fantasía, alabada seas imaginación! Jajajaja

Miss Tequila dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Martín dijo...

Paradójicamente a algunas féminas el dinero las exita.

La imaginación al poder!