pero lo hacemos igual

23 septiembre, 2018

¿Cuándo pasó?

Hoy una amiga me dijo que soñó que me cogía a su novio. Y el sueño era muy certero y muy “ah yo re podría haber hecho eso, sí, eso también”. Y dije: man, ¿cuándo fue que me convertí en la coge novios?

Cogerme gente en pareja siempre fue un no-no, códigos, no quisiera que me lo hagan a mi, no quiero acumular mal karma, whateves. Pero la vida pasa, uno aprende que de los cuernos y de la muerte nadie se salva, y ya no me dio tanta cosa, ni culpa (de la verdadera).

En algún momento tuvo que haber habido un quiebre donde dije, "ok los casados ya entran en mi lista y si entran los casados, entrarán también los noviados”. Pero el paso de no me cojo gente que-esté-en-una-relación a hacerlo fue gradual.
No fue un click pero si empecé a moverme más en los grises, fantasear un poco, medirme, tirotear, ver la respuesta, medirme, medirme hasta que finalmente me solté. Corrí mis limites (auto)impuestos y bailé el baile mientras me divertí. Estuvo bueno, me gustó. Me sentí genial, en terapia llegué a decir "me hace sentirme más viva" y todo. Le agarré el gustito a la adrenalina pero siempre en bardo controlado. Yo la bardeo entre mis límites, ahí yace mi tranquilidad mental. Pues no pienso tomar riesgos innecesarios. Tampoco la pavada. 

Después del primero vinieron más, otros. Ahora que tenía el menú extendido y era todo un mundillo nuevo me quité todas las ganas. Me divertí. Fueron meses intensos pero calavera no chilla. Eran mi público perfecto, venían, cogían, nunca tenían tiempo de quedarse y se iban. Me mimaban de lejos, me tenían como reina de otro condado, siempre bien atendida. Era perfecto. De repente solo me cogía casados o gente en pareja porque eran los que mejor me venían. Mi vida social no quedaba relegada y yo cogía mínimo 2 veces por semana.  

Me divertí mucho, hasta hoy. Cuando mi amiga me contaba su sueño. Tan realista, tan posible. Mientras ella misma me daba más detalles, no se daba cuenta que también estaba dando una nueva presa para mi. Me vi pensando en la próxima vez que lo viera cómo iba a ser para tantear y ahí. Ahí fue cuando me di cuenta de la caradurez de sentirme impune de cogerme al novio de mi amiga, una amiga que adoro que me estaba contando que se ponían mal en el sueño al enterarse, dije basta. 

Exploré mis límites y hasta acá llegué. No necesito más.

5 comentarios:

Maxima Petera dijo...

Esa chica quiere un trio....

Yoko dijo...

Pero es una amiga,Te calmas ajajajaja siempre fui fiel a que jamas iba a estar con otra persona estando en pareja.hasta que pareja de ese entonces se enculo no me hablo por un mes y yo quería coger asi que ni modo. Estuve con un casado y pensé que si el no sentía culpa por que debería sentirla yo ?siempre me sorprendió de mi, que siento culpa por todo,no sentirla en esa oportunidad

Unknown dijo...

@Yoko No sentiste culpa... ok. Y qué sentiste? Indiferencia? Satisfacción? Victoria personal? Más calentura?

S. dijo...

Me encantó tu relato!

Sebastián dijo...

Y un día volviste...